La estrategia se centró en la mejora del nivel de repetición de clientes actuales que buscaban otras alternativas (abandonos potenciales) y en la captación de nuevos clientes que buscaban un préstamo. Para ello se puso el foco en la mejora de la notoriedad de marca y el tráfico de búsquedas relevantes, ganando en cobertura y nuevos clientes, al mismo tiempo que se consolidaba la fidelización de aquellos que ya habían probado el servicio. Entre los objetivos de crecimiento se establecieron una serie de requisitos: que el CPL no pasara de una cifra concreta, que mensualmente se superara el tráfico de marca y no marca y que se ampliara la cobertura para cubrir el 100% de las búsquedas relevantes. Para ello, se llevó a cabo una restructuración de la cuenta que mejoró la segmentación de las campañas en base a cómo busca el usuario, a través de keywords específicas, separando los tipos de concordancia y mejorando así el quality score.