El blog de Kanlli. Innovación y nuevas Ideas

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Durante las próximas navidades, los comercios tendrán el reto de adaptar su publicidad comercial a las nuevas exigencias de los usuarios y sacar el mayor provecho a todas las ventajas que ofrecen los dispositivos móviles.  A estas alturas del juego, si no estás en Internet, no existes, pero es que además es importante que dejes bien claro dónde te pueden encontrar en la vida real.

La geolocalización forma parte de nuestra vida diaria.  Usamos dispositivos móviles con GPS para organizar nuestra ruta al trabajo, el ocio y viajes; encontramos las mejores ofertas, nos enteramos de locales de moda, y sabemos de aquellos restaurantes en los que no podemos dejar de comer.  Lo cierto es que ese mapa virtual en nuestro bolsillo nos hace la vida más fácil.

La geolocalización como táctica dentro de una estrategia de venta es algo que no deben pasar por alto aquellos establecimientos a pie de calle, pero no sólo aquellos que pertenezcan a grandes multinacionales, sino también los pequeños comercios y los negocios familiares, quienes pueden sacar provecho de esta tecnología con un poco de ingenio. Las grandes empresas requerirán de una estrategia más elaborada, aplicable a todos los establecimientos o sucursales que las integren.

Los smarthpones y tablets abren un mercado de oportunidades para el marketing online.  En España, los datos más recientes publicados por la agencia Nielsen apuntan a que más de la mitad de los internautas utilizan sus dispositivos móviles para comparar precios y encontrar regalos en Navidad. Por su parte, la consultora de IT estadounidense Gartner, publicó un estudio a mediados del 2012 que concluye que en el 2015 el marketing móvil y social influenciará el 80 por ciento de las compras a nivel mundial.

Sin ir más lejos, un reciente estudio de Sybase 365 y la Asociación de Marketing Móvil (MMA), un 87% de los consumidores usarán el móvil para hacer sus compras navideñas, un 25% más de los que declararon su intención de hacerlo en 2011. Lo utilizarán para buscar ofertas y descuentos, comparar precios, localizar reseñas de productos y evitar aglomeraciones y colas en las tiendas. Contar con una buena estrategia que integre la geolocalización puede suponer la diferencia definitiva con respecto a nuestra competencia.

Aplicaciones como Foursquare, Gowalla, Yelp y Facebook Places dejaron de ser hace meses simples redes sociales para convertirse en una efectiva herramienta de captación de clientes, por sí mismas o a través de ofertas especiales.  Han comprendido la valía de compartir la ubicación, y el desarrollo de un modelo de negocio basado en promociones locales que serán el motor de crecimiento del comercio móvil.

A estas aplicaciones le sumamos el éxito de Google Places, y la red más completa de mapas y locales a nivel mundial del gigante de Internet.  El buscador prioriza las recomendaciones de los usuarios para mostrar determinados resultados de búsqueda, haciendo que el “boca a boca” sea uno de los grandes aliados de los negocios para hacer publicidad. La geolocalización supone un nuevo canal de ventas que ofrece la oportunidad de personalizar las ofertas, de mostrar precios dinámicos a través de las aplicaciones web para móviles.

Si, hoy por hoy, para muchos es un dolor de cabeza dejarse el móvil en casa, se estima que en 2013 el móvil será lo único que realmente necesitemos: todos nuestros datos estarán disponibles a través de aplicaciones móviles con las que podremos pagar en los locales sin necesitar una tarjeta de crédito o dinero en efectivo. Google Wallet va en esa dirección, con muy buena acogida entre los usuarios en Estados Unidos.

En resumen, podemos decir que la geolocalización es lo que hará que un establecimiento y sus ofertas sean o no visibles para los consumidores sobre el propio terreno, es decir, en el momento mismo en el que un usuario está buscando un determinado establecimiento para efectuar una compra. En este sentido, realizar las trabajosas compras navideñas se convierte en una tarea mucho más fácil.

Pero no olvidemos que la geolocalización también afecta al consumo asociado al ocio. Saber qué establecimientos o comercios se encuentran cerca de nuestra posición ayudará a que tomemos una decisión. Si además de para localizar un establecimiento, nuestro teléfono nos sirve también para acceder a reseñas u opiniones sobre el producto o servicio, para pagar y para compartir nuestra experiencia con nuestros contactos, el círculo se cierra. No hay duda de que no hay nada más efectivo que aparecer en el camino del consumidor que está buscando lo que una determinada tienda ofrece.